soy una ermitaña que estudia gramática, estudia: hipotaxis, parataxis, extasis. estudia implemento suplemento supuesto. certeza. estudia coordinación constelación subordinación dependencia.
interdependencia.

alarcós, guillermo rojo, tú.

la función de la proposición en español la función de mis dedos sobre las teclas la función de todo esto en general y sin ser demasiado específica

(sólo pienso en mi lengua como española cuando estoy en clase de gramática o de sintaxis, el resto del tiempo no pienso en mi lengua, le dejo que juegue con lo que tenga a mano)



no es por el título, es porque es lo más relacionado que encontré en goear con el día de mañana.


bajo a la cocina. tengo hambre, tengo ansia, no sé de qué. busco por los armarios y en el frigorífico, pienso: quiero algo que cruja. pienso: quiero algo que se funda. quiero algo dulce pero que arda en el fondo de la garganta. algo que se desilce entre mis labios frenéticamente.

me doy cuenta de que lo que quiero es tu boca o tu piel o tu glande tan suave.
claro, de eso no me queda en la cocina.


me preparo dos panecillos con queso filadelfia y leo cuentos de benedetti. y hago otra entrada absurda.