podría empezar a redactar wittgenstein, pero la verdad es que lo que hago es esperarte. es la una, pero de todas maneras yo te espero, sé que no vas a venir, pero de todas maneras esperos. y pienso que las palabras no pueden ser más que palabras, no puede caber en ellas más que lo que de hecho cabe, como una taza te desbordada, que llena todo el suelo de sangre porque no le cabe más dentro, y es que las palabras son lo que son y no más; son tazas de té y son figuras análogas al mundo, y lo dibujan y nada más en ellas cabe. nada cabe más tampoco en el mundo que los propios hechos del mundo. y eso es exactamente lo que hay. sangre por el suelo, y todas las tazas de té rotas por la escalera.

como hoy.

este último mes ha sido antes que cualquier cosa una escalera que tengo que tirar para poder seguir adelante según lo apren(he)ndido.